"Buenos días"

Van a llegar días buenos, 

aunque los malos nunca hayan desaparecido, y no vayan a hacerlo.

Pero va ha haber alegría, y tu sonrisa dejará de ser forzada.

Porque un augurio deja de ser falso en el momento en que tus preciosos labios pronuncian las palabras que lo conforman. Aunque sea la mentira más mezquina. 

Porque sólo puedo fijarme en cómo se mueven, en cómo bailan sobre tu boca. Y recordar los días en los que bailaban sobre la mía. 

Porque te necesito como el sol a la luna, como la noche al día, como el frío al calor. 

Y claro que existen los días malos. Te sumerges en la cama, te apagas, te corrompes y lloras a la almohada, que a veces parece ser la única en saber soportar y comprender tu dolor.

Pero entonces te mira y te dice "te quiero", y luego te sonríe al ver que no respondes. Y te dice "te odio". 

Y lo sientes.

Puedes entenderlo porque eres capaz de odiar y amar tanto a la vez, que a veces te sorprende. Eres capaz de sentirte triste y feliz, como sólo algunos podrían entender.

Pero a pesar de todo, también eres capaz de decir que a partir de hoy habrá más 

días buenos

que malos.